20/2/08

LAS INVASIONES ARGENTINAS (аргентинские вторжения)

Dentro de la historia argentina, como sabemos, hay muchos hechos que nos han sido ocultados. Quizás, en el mejor de los casos, nos los han contado según consideraban que podían ser relatados. Entre todos estos sucesos hay uno que, probablemente, sea el que mas han querido olvidar. Pero no puede quedar por siempre en las sombras lo que sucedió en aquel lejano año de mil novecientos diecinueve, ya es hora de difundirlo...

En Argentina hacia casi tres años que gobernaba Hipólito Yrigoyen. Había ganado las primeras elecciones celebradas desde que fuera sancionada unos años antes la ley Sáenz Peña que establecía el sufragio obligatorio, secreto y universal (universal excluyendo a las mujeres, por supuesto).

La Primera Guerra Mundial había concluido y por Europa empezaban a reabrirse los mercados para los cereales y las carnes argentinas. El "granero del mundo" podía nuevamente hacerle honor al mote, después de los económicamente difíciles años de la guerra para la Argentina.El peludo se había mant
enido neutral durante la Primera Guerra Mundial; pero no pudo quedarse al margen de lo que estaba sucediendo en Rusia, donde la guerra civil estaba en su peor momento.

A finales del año diecisiete los bolcheviques habían firmado el armisticio con los Imperios Centrales y ya entrado el año dieciocho tuvieron que firmar el Tratado de Brest-Litovsk que le permitió a algunos otros gobiernos obtener unas poco duraderas ganancias territoriales. Lenin se inclino por poder concentrar sus fuerzas en la lucha interna. En algunos sectores del país la oposición había logrado afirmar una fuerte resistencia que fue apoyada por las potencias de la Entente para terminar con el Ejercito Rojo.En este contexto fue que la Argentina también participo en el conflicto. Tal vez porque los mercados reabiertos no fueran suficiente para todas las toneladas que se acumulaban en el puerto de Buenos Aires; o quizás porque otras potencias europeas pusieron algunas condiciones para comprar productos argentinos...

En agosto del diecinueve llega al Golfo de Finlandia la fragata "Santísima Ganadería" al mando de un descendiente de Federico Rauch. La tripulación estaba compuesta en su mayoria por las fuerzas de choque que habían sido utilizadas durante la Semana Trágica para terminar con la huelga generalizada de enero de ese año en Argentina, también consiguieron alistarse algunos de estos obreros huelguistas con la secreta intención de pisar suelo ruso y cambiarse de bando.

En un principio tenían como objetivo bloquear el puerto de San Petersburgo (entonces Petrogrado), pero la verdad que no podían parar a nadie y decidieron desembarcar y unirse a los demas ejércitos que estaban ahí para "defender los elevados ideales del libre comercio y la propiedad privada" (sic).

La nave llego a orillas del Neva y la sorpresa fue mutua. Unos no entendían de donde había salido este monstruo de los mares, la mayoría de los Rojos ni siquiera reconocían a que país pertenecía esa bandera y los argentinos se acababan de enterar que el frente Blanco se encontraba en el sur del país, es decir, a miles de kilómetros.

Como están pensando el enfrentamiento fue efímero. Algunos ni siquiera llegaron a descender de la fragata, pero esto tampoco los salvo porque los obreros habían tomado ya el timón y después de reducir a los represores que quedaron a bordo entregaron la "Santísima Ganadería" al ejercito del pueblo mientras revoleaban camisetas rojas como muestra de amistad.

Todos los militares fueron tomados prisioneros y obligados a desfilar en cueros por la Nevsky mientras algunos efectivos de las tropas rojas portaban y mostraban a los espectadores banderas argentinas. Había unos que cantaban: "Le afanamos la bandera, que la vengan a buscar!" (мы стырили у него флаг, пусть за ним придут!), otros henchidos de pasión y furia gritaban: "Les robamos los trapos!" (мы украли у них тряпки!). Un poco mas tarde ya cantaban en las calles al ritmo de las balalaikas:

"Vinieron de allá muy lejos,
atraídos como por lejanos ecos.
Con la excusa de la libertad salvar,
querían la oxidada corona restaurar.
-
Pretendían en estas tierras enseñar
en que consiste gobernar
ellos que apenas hasta cien sabían contar
-
Mas sabiendo como deshacerse de ellos
y sin dejarlos actuar,
el camarada Lenin los hizo cagar.

-
'Nada tenemos que aprender
de aquel intento de país
-dijo nuestro guía al embestir-
donde la ley la dicta la res'."

***

Sobre el destino de los obreros anarquistas poco se puede averiguar. Es mas que factible que hayan perecido heroicamente entregando su vida por la Revolución. Los marineros argentinos fueron puestos en un barco y enviados de vuelta cubiertos de oprobio; pero estos prefirieron quedarse de este lado del océano, donde fueron recibidos por diferentes gobiernos de la Entente. La "Santísima Ganadería" quedo anclada detrás del Aurora, en la orilla norte del Neva, cerca de la estación Finlandia y fue hundida por los nazis durante el bloqueo a Leningrado en el cuarenta y dos.De esta aventura (o desventura) lo único que queda son algunas banderas argentinas desparramadas por las zonas mas concurridas de Rusia exhibidas como trofeos de guerra a una nación que podría haber llegado a ser mucho mas de lo que termino siendo

Fuente: "Horademoscu.blogspot.com"


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